19 jun 2010

Historia

No.
Pienso en el final del tiempo en mi celda y su función en mi esgrima.
No
Pienso en mi espada y la funda que guardo con celo. Pulo y vigilo abrazado a ella y al peligro.
No.
Pienso en la costa y el grito de los ahogados. Desembarcan de noche, mi patria duerme y yo la traiciono.
No
Pienso en la consecuencia, en mi silencio.

/

Mar rodeado de tierra y sol.
Abrazo a un hijo perdido un millón de veces y él sigue perdido. Se aferra a mi cazadora. Intenta robar mi cantimplora ante la indiferencia. Golpea mi bota, buscando respuesta.
Tomo mi bayoneta y lo empujo lejos. Donde es pisoteado por los rasos.

/

Mi canción de libertad es recitada una y otra vez por mis subalternos. Los mismos que me declaran demente al perder la batalla. Los declaro demente a ellos, demasiado consciente de mi desnudez en la tundra de la locura intento huir. Vencido.
Con vacios. Rendido he perdido parte de mi historia