18 abr 2009

Ala Delta



El Propósito

De un puñado de palabras
lanzadas al mar,
al acantilado
de tus deseos reprimidos.

De una Dedicatoria

A la depresión de toda esas metas,
propósitos absurdos.
Dedicado a tus miedos,
a las veces q borré tu sonrisa en sueños.

II

Ante que todo
apoya la cabeza contra tu palma,
y ve al cielo.
Desaparece.

Planea entre las nubes.
Vuela en ala delta entre deseos futuros.
Mientras la naturaleza observa,
yo me anclo a tierra,
me es imposible seguirte.

Recorre caminos terrenales.
Aférrate a lo construido por el hombre.
Unas cuantas luces incandescentes
un poco de maquillaje.
La vanidad en el aire.

Me es imposible seguirte.

III

Pronunciar tu nombre tres veces
una invocación al pasado.
Volver a los tiempos deshumanizados
donde todo importa.

Solo aminoácidos,
estructuras unicelulares,
luego vegetales y
hasta dinosaurios extintos.

Romance entre amebas,
particiones de bacterias.
Virus que se propagan a su merced.
Organismos que se erigen poco a poco.

Estrictos los sentimientos,
solo lo necesario.
La búsqueda de alimento,
la búsqueda de eternidad.

Contados los gritos guturales de apareamiento.
Sabanas selváticas de hace millones de años,
uno que otro macho cavernícola
expresa su afecto con vocablos básicos.
Los míos nunca lo fueron.

IIII

Mientras la naturaleza observa,
los troncos enmohecidos temen.
Carbonizados por el animal de costumbres
desaparecerán en un torbellino de cenizas
y recuerdos.

Mientras la naturaleza observa,
hombres en alta mar
perforan su propio hogar,
por un líquido que desaparecerá
en volutas de humo y sangre.

Mientras la naturaleza observa,
el viento se cuela por la selva
y la llanura creada por la maquina.
Una montaña invertida se extiende.
En su interior hombres trabajan su desdicha.

Mientras la naturaleza escucha,
los ruidos animales hacen eco en el tiempo.
Tigres dientes de sable que acechan.
A lo lejos mamuts de pisada fuerte
que se protegen entre sí.

Mientras tu esencia observa,
tomo la humanidad como mía.
Toco estrellas y galaxias,
donde no llega tu ala delta.
Te es imposible seguirme.

V

Amarro la esperanza
en redes que lanzo al mar.
En las manos que forjan esas redes
miles de historias nunca dichas.

Manos fuertes de mil años
forjan sentimientos innombrables.
Lazan nudos que recorren lo que soy,
carne y hueso impotentes ante el olvido.

La tempestad hace su jugada,
aparece de la nada
y vuelve trizas el sentimiento.
Mar adentro corre lo que algún día
provocaste en mí.

Aunque existo,
y aunque extraño tus labios
me borro poco a poco.
Entre nubes de polvo y sangre,
desaparezco.

Sin dejar huella.

VI

Solo un puñado de palabras
que lanzo al olvido.
Nunca fui tan de Nadie.
Nunca serás tan de Alguien.

Dedicado a tus metas,
tus sueños.
Dedica tiempo a lo que importa.
Felicidades.